Querido Dios (24) – El Enredo
Hay momentos en la vida en que uno siente que todo es un “enredo”. Sabes que hay un camino, pero no lo ves claro. Cuando crees que has encontrado una pista , la vida te devuelve hacia otro lado. Y equivocadamente crees que estás en control, y a veces tratas de forzar las situaciones para encontrar las respuestas, y obviamente lo que sucede es que las cosas se complican aún más, hasta que en un momento determinado te das cuenta que tienes que soltarlo todo, y que es Dios el que está en control. Y si bien tú no entiendes lo que está sucediendo, él tiene un plan perfecto para ti. Es en ese momento en que tienes que recordar que hay que vivir como una palmera, flexible, a veces tocando el suelo, otras veces alcanzando las estrellas. Y así mismo es la vida, llena de aprendizajes y está en ti como vives cada instante, con que actitud te levantas cada día, revisando de nuevo tu real propósito aquí en la tierra para no permitir que ningún enredo te desvíe. Hay partes del camino donde a pesar de todas las vicisitudes puedes encontrar algo de paz y alegría alrededor tuyo y sobre todo dentro de ti.